‘Eclipse total’

Eclipse total

El aire se vuelve frío y el cielo empieza a oscurecerse. Dicen que algunos perros aúllan y que las abejas se amontonan colapsando la entrada de sus colmenas. Algunos pájaros vuelan confusos. El tiempo se para. Todo está en silencio. Todo es oscuro. Todo suspendido… sin saber qué ocurrirá… con la sensación de que podríamos permanecer siempre en esta noche infinita… Pero unos segundos después, quizás unos minutos, o podrían ser años, generaciones o milenios, el día llega de nuevo. Una profunda emoción nos invade y sentimos el privilegio de haber sido testigos de un hecho incomprensible. Hemos asistido al ensayo general de un posible final.

Una propuesta que impregna de humor el ritual, que mezcla lo transcendental con lo cotidiano y que parte de lo íntimo y personal hacia lo social. Un ejercicio escénico que intenta relativizar la vida, para vivir quizás con más consciencia ese minúsculo instante que supone nuestra existencia en toda la historia de la humanidad.