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Los embalses de Álava

Pantanos de Álava

El territorio Histórico de Álava cuenta con cuatro embalses y pantanos: Embalse de Ullibarri-Gamboa, pantano de Urrúnaga y embalse de Albina, que forman parte del sistema del Zadorra y el  embalse de Maroño, que se encuentra en el municipio de Ayala, protegido por la Sierra Salvada.

Los tres primeros se localizan en la zona centro-septentrional de la Llanada Alavesa, a unos quince kilómetros de la ciudad de Vitoria-Gasteiz. Por sus características cuentan con una gran riqueza de especies vegetales y animales ligadas al medio acuático, haciendo de esta zona el humedal interior más importante del País Vasco. Ofrece zonas idóneas de alimento y reproducción para un gran número de aves acuáticas.

Embalse de Ullibarri-Gamboa

Embalse de Ullíbarri-Gamboa

Éstos pantanos y embalses de Álava a su vez cuentan con diversos lugares de esparcimiento. Ofrecen múltiples opciones para los deportes acuáticos y rutas señalizadas para la práctica del senderismo o la bicicleta. Además de contar con varias playas, algunas de ellas acondicionadas para el baño y con amplias zonas verdes donde estar en contacto con la naturaleza.

Embalse de Ullíbarri-Gamboa

Es el más importante y extenso de todos los embalses de Álava. Emplazado en el municipio Alavés de Arrazua- Barrundia, sirve para abastecer de agua a la ciudad de Vitoria-Gasteiz y a los alrededores de Bilbao. Es un espectacular paraje que sirve como área de recreo y esparcimiento, al que acuden multitud de vecinos del entorno cuando asoma el buen tiempo.

Cuenta con las playas de Landa y Garaio, reconocidas con bandera azul por la calidad de su entorno y los servicios que ofrecen

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Tiene dos rutas principales para la práctica del senderismo y la bicicleta: la ruta circular entre Garaio y Azua de 13 kilometros y la ruta que rodea la totalidad del embalse con 45 kilometros. En ambos casos la ausencia de grandes desniveles y la comodidad del recorrido hacen que las orillas del embalse se conviertan un espacio muy demandado para andar en bicicleta. Además es de fácil acceso desde Vitoria-Gasteiz sin necesidad de salir a carretera, por la ruta verde del Vasco navarro.

Embalse de Ullíbarri-Gamboa

Embalse de Ullíbarri-Gamboa

Cuenta con las playas de Landa y Garaio, reconocidas con bandera azul por la calidad de su entorno y los servicios que ofrecen. Este pantano reúne, además, unas inmejorables condiciones para la práctica de todo tipo de actividades y deportes acuáticos, como pueden ser el windsurf, el piragüismo o la vela. Además cuenta con dos clubes náuticos y embarcaderos.

El embalse forma en su interior unas pequeñas islas. De las cuales la más importante es la de Zuaza, que cuenta con un albergue donde en verano se organizan colonias infantiles. Ya que cuenta con excelentes instalaciones y servicios, con zonas de baño, mesas, asadores y áreas de recreo.

Embalse de Urrúnaga

También conocido como el pantano de Villarreal o Legutiano, se encuentra a los pies del monte Gorbea. Pertenece mayoritariamente  al municipio Alaves de Legutiano, aunque parte de la presa se encuentra en Otxandio, municipio de la provincia de Bizkaia.

Embalse de Urrunaga

Embalse de Urrúnaga

Este espléndido enclave favorece el desarrollo de actividades relacionadas con el deporte y el ocio. A orillas del embalse se han habilitado los parques de Sorgimendi y Zabalain, con mesas, parrillas, fuentes y juegos infantiles. Lugares ideales para pasar un día en familia. Por otro lado, hacia el norte, se ubica el Campo internacional de regatas, que funciona como escuela.

Embalse de Albina

Junto al embalse de Urrunaga dirección a Arrasate-Mondragón, y a unos 9 kilómetros de Vitoria-Gasteiz se encuentra éste pequeño embalse rodeado de bosques. Se extiende aproximadamente a lo largo 4 kilómetros. Hay una recomendable ruta circular alrededor del embalse.

Es un lugar de gran belleza, sin embargo no está permitida la navegación ni ninguna otra actividad de ocio salvo la pesca.

Embalse de Maroño

Éste embalse del municipio de Ayala abastece de agua a las localidades vecinas y es de gran interés para los amantes de la pesca. Se trata de un bello paraje natural con amplios espacios rodeados de verdes praderas, con bosques de pinares y robles.

Es un lugar que sirve de refugio para las aves migratorias, que en condiciones climatológicas adversas no puede sortear la sierra Salvada.

A sus alrededores el visitante puede disfrutar de otras bellas estampas, como el Cañón de Delika, a los pies del salto del río Nervión con más de doscientos metros de desnivel.